Los datos aportados resultaron clave para que la Subsecretaría de Pesca decretara su veda durante el período estival, generando ahora un auspicioso escenario para la pesquería.
Iquique, marzo 2015.- A pesar de un fenómeno de El Niño débil, la anchoveta mostró un incremento considerable en cuanto a su biomasa de juveniles, una buena noticia para el fortalecimiento del stock de esta especie en el sur del Perú y norte de Chile.
Esta es una de las conclusiones de un reciente estudio del Centro de Investigación Aplicada del Mar (CIAM) en cooperación con el Instituto de Fomento Pesquero (IFOP), a través de una serie de cuatro cruceros de investigación llevados a cabo entre diciembre y marzo en los mares del norte chileno.
El objetivo central era seguir la evolución del proceso de reclutamiento de la anchoveta durante el período, datos que resultarían fundamentales para que la Subsecretaría de Pesca decretara una veda de pesca de anchoveta, la que tuvo una duración de dos meses y medio aproximadamente (23/12/2014 al 6/3/2015).
La iniciativa de CIAM, en rigor, comenzó en octubre pasado, cuando investigadores del centro detectaron en el plano costero huevos y larvas de anchoveta en una cantidad tal que sobrepasaba por mucho lo observados en la última década. De inmediato se comenzó a trabajar con el fin de evitar la pesca de juveniles, los que al ir creciendo, comienzan a ocupar un espacio marino menos costero, haciéndose más vulnerable a la pesca y a sus redes, impidiendo por una parte su desarrollo a adultos -con pérdidas considerables en biomasa pesquera- y por otra generando serios problemas operacionales a las naves pesqueras, quienes estropean sus artes de pescas, con costos también importantes para los armadores.
Los cruceros de investigación de CIAM incluyeron el trabajo simultáneo de hasta seis buques, todos equipados con ecosondas con capacidad para medir el tamaño de los peces. Esta valiosa información fue oportunamente entregada a la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura, para que ésta pudiera extender o terminar el periodo de prohibición de captura.
La labor informativa de CIAM también se extendió a la industria pesquera del norte, estableciendo zonas donde aún los peces mostraban tamaños bajos, de manera de que se evitaran las capturas, permitiendo así un adecuado desarrollo y madurez para esos cardúmenes.
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