FOTO CETACEOS

La ausencia de datos sobre el comportamiento de estos mamíferos y su interacción con las pesquerías, no permite desarrollar estrategias operacionales que aborden esta temática.

El Centro de Investigación Aplicada del Mar (CIAM) en su continua búsqueda por estudiar el mundo marino, desarrolló una investigación sobre la co-ocurrencia de cetáceos en las zonas de pesca industrial de cerco en el norte de Chile y sus implicancias tanto tróficas como ecológicas.

La gran productividad primaria que se genera en el Sistema de la Corriente de Humboldt (SCH), posiciona a Chile como uno de los países pesqueros más importantes del mundo.

En ese contexto, el SCH alberga importantes especies de peces sobre todo desde el punto de vista ecosistémico y económico, entre las que destacan la anchoveta por su elevada biomasa -especie clave en la dieta de muchos depredadores superiores- y por sustentar a la industria de la harina de pescado.

Los mamíferos marinos –predadores tope en la cadena trófica- están presentes en casi todas las zonas utilizadas por la pesquería, coincidiendo en las mismas áreas geográficas, por lo que la interacción entre ambos es prácticamente inevitable.

En ese sentido, podemos reconocer dos tipos de interacciones entre las pesquerías y los cetáceos: las ecológicas y las operacionales. En las aguas jurisdiccionales de Chile, se ha registrado una alta diversidad de cetáceos, con 38 especies (50%) de las 76 a nivel mundial.

Para el norte de Chile, la ausencia de estudios sobre el comportamiento de los cetáceos que interactúan con las pesquerías, no permite desarrollar estrategias operacionales con el objetivo de implementar protocolos y tecnologías que aborden esta temática.

El presente trabajo propone realizar un catastro de las especies existentes de cetáceos, determinando la distribución en las costas del norte de Chile –Arica y Taltal- y relacionar su presencia con las zonas de pesca industrial de cerco, centrado en la co-ocurrencia e interacción.